El camino que conocías, las palabras que sabías, los olores y sabores que hacían que te sintieses protegida.. decidir acabar con todo. Sentir que, de no hacerlo, no irás a ninguna parte y te quedarás allí, fingiendo vivir.
Esto no me gusta. No quiero que sufra. No se lo merece. Siempre ha sido bueno conmigo. Me quiere. Se preocupa. Aunque sea un poco celoso. Ayer, cuando estaba a punto de decírselo, me sentí morir.